Hoy quiero hablar sobre uno de los conceptos más famosos de todo Internet; concepto qué en algunos casos nos es mostrado hasta la saciedad: Las cookies. Sí, ese famoso concepto que generalmente vemos al visitar cualquier página web medianamente conocida y/o moderna. ¿Quien no ha visto mensajes parecidos a: "Al entrar a este sitio web, aceptas nuestra política de cookies?" Así es; es raro que no hayamos visto estos mensajes en la actualidad, pero más de uno nunca se ha parado a pensar en lo que ese texto conlleva o, mejor dicho, lo que dichas cookies, o galletitas, suponen.
Las cookies son una serie de datos, almacenados en formato texto, que contienen datos de la sesión de navegación y los parámetros de configuración de la web, entre otros... Esos datos son creados por los servidores web y luego serían descargados y almacenados por el navegador web y pueden ser usados para hacer un seguimiento de nuestra navegación web. Además, es importante saber que hay más de un tipo de cookie; en concreto habría cinco tipos de cookies:
- Cookies de sesión: Son aquellas que se eliminan automáticamente al terminar la navegación.
- Cookies persistentes: Estas cookies no importa que cerremos la sesión de navegación que seguirán guardadas en nuestro equipo para ofrecernos una experiencia más ágil la próxima vez que se viste la página, ya que guardan los datos de las sesiones, tales como los datos de login o las preferencias de idioma. Este tipo cookies tienen una fecha de caducidad tras la cual se eliminarían automáticamente; la cuestión está en que está que generalmente dicha fecha de caducidad puede ser a muy largo plazo; desde uno o dos años hasta 10,20 años o más... Con lo que hay que tener cuidado, ya que si no limpiamos nuestras cookies a menudo podríamos tener cookies de una enorme antigüedad guardadas en nuestro equipo; cookies que podrían contener información sensible.
- Super cookies: No, no son cookies con más información, sino cookies más peligrosas que el resto. Una cookie normal está siempre asociada a un nombre de dominio; ya sea bytelearning o el que sea, pero una super cookie está asociada a extensiones de dominio (.com, .es, .net...). Esto no puede parecer relevante, pero sí que lo es, ya que dichas cookies pueden seguir el "rastro" de una persona independientemente del dominio que visite. Afortunadamente la mayoría de los navegadores más modernos ya bloquean dicho tipo de cookie automáticamente, pero si se estuviese usando una versión antigua de Chrome o Firefox podríamos sin querer "comernos una galleta equivocada".
- Cookies zombies: Cookies que aún cuando son borradas, son generadas de nuevo debido JavaScript o HTML5.
- Cookies Flash: Esta "cookie" es un archivo especial usado por las páginas web que implementan Flash. Para bien o para mal, estas cookies cada vez son menos frecuentes, pues hay navegadores que directamente bloquean Flash por defecto; tales como Chrome y Firefox.
Ahora bien; estas cookies que son almacenadas por el navegador, tienen que estar almacenadas en algún lado... ¿Pero donde? La ubicación de éstas dependería de dos factores: El navegador y el sistema operativo. En mi caso me centraré en el sistemas operativos basados en GNU/Linux y los navegadores más populares; Chrome y Firefox.
En chrome:
La ubicación de las cookies, en caso de estar usando este navegador sería:
~/.config/google-chrome/Default/cookies
En Firefox:
En caso de usar este navegador o Iceweasel (que para el caso son prácticamente iguales).
~/.mozilla/firefox/serie_de_numeros_y_letras.default
Ambos tipos cookies pueden ser leídas tanto mediante la consola con sqlite (cosa no demasiado recomendable, debido a que lo mostrado no queda demasiado ordenado) o con sqlitebrowser, que se trata de una aplicación gráfica que muestra dicha información de forma más intuitiva y amigable. Esta última aplicación no estaría por defecto instalada pero su instalación sería algo tan sencillo como:
apt-get install sqlitebrowser
Esta aplicación es muy amigable pero tiene como pega el hecho de que requiere introducir la ruta completa donde se encuentra alojada la cookie; ruta que por defecto está oculta (todo aquello que empieza por . significa que el fichero o directorio está oculto) y que es algo engorrosa de introducir a la hora de querer abrir la base de datos que almacena dichas cookies. Con lo que si bien este método "global" es muy potente y versátil, lo más cómodo para un usuario final sería revisar las cookies de su navegador especifico con una herramienta más "directa".
Las opciones más amigables serían el uso de extensiones especificas para cada navegador; aquí, como siempre para gustos están los colores, pero la extensión con la que me he sentido más cómodo con cada navegador sería:
- Firefox: Cookies Manager. Es un gestor de cookies bastante sencillo a nivel visual, pero que cumple con su objetivo; que es el poder visualizar, editar o eliminar nuestras cookies.
- Chrome: Edit this Cookie. Tiene las mismas funciones que la mencionada antes para Firefox, si bien ésta es algo más atractiva a nivel visual.
Cookies Manager Iceweasel
Gracias a estas herramientas podemos controlar con gran libertad nuestras cookies, logrando tener cierta noción de las cookies que están siendo descargagadas a nuestro equipo.
Como veis, las cookies es un asunto bastante amplio y completo; aunque afortunadamente hoy en día contamos con gran número de recursos para tenerlas bajo control y saber qué se está descargando nuestro equipo. Además gracias a recursos tales como la navegación privada y/o el no recordatorio del historial, nos pueden ayudar a no almacenar esas cookies persistentes que pueden llegar a ser contraproducentes almacenar dependiendo de nuestras necesidades.
Saludos.
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