“Si la versión afectada de WebView es anterior a 4.4 no desarrollamos parches de seguridad, aunque sí consideramos aceptar parches externos junto a los informes. Además de notificar a los OEMs no estaremos capacitados para realizar ninguna acción o tener en cuenta informes de seguridad que afecten a versiones anteriores a 4.4, si estos no están acompañados de un parche”.
Esa
noticia ha supuesto un grave descenso en la confianza puesta en
Android. Dejando de lado la sensación de abandono que pueden sentir
usuarios de a pie que pertenecen a dicho 60%, el sector corporativo
se encuentra en un grave problema: Imaginemos que un empleado posee
una tablet de dos años de antigüedad con información sensible
(estadisticas, clientes, contactos, etc…). Las limitaciones del
hardware de dicho dispositivos nos impiden actualizar su sistema
operativo, ya que éste no podría ni arrancar siquiera y en caso de
hacerlo apenas podría ejecutar operación alguna debido al gran
consumo de recursos que poseen de base las últimas versiones de
Android. ¿Qué puede hacer dicha persona frente a semejante
situación? ¿Vivir bajo la premisa “No creo que me hackeen, eso
solo les pasa a los que usan su dispositivo descuidadamente”?
¿Cambiar de tablet con su consiguiente gasto? Hay que tener en
cuenta que las empresas grandes realizan importantes desembolsos
económicos cada vez que cambian de Ordenadores, tablets, etc…
Dejando
de lado el mundo empresarial, pongámonos en la piel de cualquier
persona que no pertenezca al sector técnico. Una persona que usa el
móvil para hablar por Whatsap, navegar por Internet y descargarse
alguna que otra aplicación y/o juego. Posee un móvil relativamente
nuevo (un año por ejemplo) con Android 4.2 y su hardware sí que
puede soportar Android 4.4 sin ningún problema. Ahora acércate a
dicha persona y dile que tiene que instalarse Android 4.4 y que el
proceso no es tan simple cómo darle un botón y volver a la media
hora con la nueva versión instalada y que además el instalar el
nuevo sistema operativo supone la pérdida de la garantía;
Probablemente esta persona te conteste que no se va a molestar en
actualizar el móvil “¿Total quien me va a hackear a mí?”. Esa
pregunta retórica, es formulada por una ingente cantidad de personas
que, a pesar de ver todos los días en las noticias que el malware en
dispositivos móviles (especialmente Android) está creciendo a un
ritmo insospechado, piensan que eso nunca les va a pasar a ellos…
La
verdad es que aunque seguramente esta noticia no llegue a muchas
personas, Android acaba de de dejar en el olvido a más de la mitad
de sus clientes; Clientes que han depositado su confianza en ellos.
Para empezar dicha información debería haber sido divulgada en un
comunicado oficial, y lo ideal (y lo correcto) habría sido que
informasen de que en una fecha señalada, dejarían de desarrollar
parches para versiones inferiores a la 4.4; Algo parecido a lo que
hizo Microsoft con el fin del soporte de Windows XP.
Aún
así, de todo esto puede llegar a salir algo bueno: Esto puede servir
cómo toque de atención a los fabricantes de móviles (que ganan
dinero por el hardware, no por el software); Fabricantes que a día
de hoy venden muchos móviles con versiones obsoletas de Android en
los móviles de gama media/baja que podrían soportar versiones
superiores. Cierto, muchos móviles no serían capaces de soportar
KitKat, pero al menos el hecho de que empiecen a usar versiones más
actuales sería una señal de que vamos por el buen camino. Ahora
bien, ¿Dichos fabricantes harán algo? Personalmente tengo mis
dudas.
Visto
lo visto tal vez no sea un disparate plantearse otras opciones con un
soporte (en apariencia) más extendido, tales cómo Windows Phone,
Tizen, Firefox Os o el inminente Ubuntu Touch cuyo éxito dependerá
en su capacidad de adaptación a los mercados.
Estoy totalmente de acuerdo con tu indignacion, me parece increíble que no hayan avisado y que sean capaces de dar tal paso dejando de lado a tante gente... irresponsabilidad total
ResponderEliminar